martes, 20 de abril de 2010

Síndrome de cuerdas gastadas

¿Saben, señores y caballeras, de esas personas lánguidas, tristes, apagadas?¿Esas que te cruzas por la calle y no te llaman la atención, que se toman un café a tu lado y ni siquiera dedicas tu tiempo a observar?
Personas con el corazón prácticamente vacío, con el alma recostada vagamente en algún rincón de esos sórdidos y entumecidos cuerpos. Personas que han perdido la sonrisa en los ojos, la alegría en los labios...
Personas dedicadas a su monotonía, a las que la ilusión se les ha ido desgastando poco a poco; aunque,bien es verdad, aún quedan rescoldos de lo que fue llama, y solo hace falta un pequeñísimo gesto para volver a avivarla...

Como una cuerda gastada, te lo digo yo. Esas cuerdas, usadas y reusadas por los mismos aún inexpertos dedos. Acariciadas a veces con ternura, a veces con furia, con dureza... incluso con un aire divertido; y siempre con una pasión inimaginable.
Cuerdas que ya no dañan las yemas de los dedos como antes. Cuerdas que han cambiado hasta de color por el gran desgaste. Que incluso tiñen de negro los callos de tus dedos, para que recuerdes que están ahí...Cuerdas que han cambiado de sonido.
Ya no son las que eran, no tienen brillo, ni tacto, ni color. Incluso tu guitarra no parece la misma, ¡¡si ni siquiera se dejan afinar bien!!
Hace tiempo que quiero cambiar mis cuerdas, pero siempre que me acuerdo ando sin dinero...
¡Qué síndrome más feo!

3 comentarios:

  1. Anda por dios!!!!! sólo tienes k darme una voz y kedamos en la Constitución: tú tocas la guitarra...yo canto... y dineral ke te crió!!!

    (a veces puedo bailar tambien)

    ResponderEliminar
  2. No sé por qué acabo de imaginarte bailando en plan balanceo (borracha por supuesto) y dando chillidos puntiagudos con un micro mientras yo toco atemorizada a tu lado..... no sé por qué... jajajajja

    Haríamos negocio eh? pero habría que enseñar los pechos (tus pechos) jajjajajja

    ResponderEliminar
  3. ¿Qué más da lo gastadas que estén las cuerdas siempre que no falte esa pequeñísima llama? Más vale vivir con el síndrome de las cuerdas gastadas teniendo alrededor a gente dispuesta a proporcionarte esa llamita que vivir con un radiante fuego en el cuerpo (por favor, entiéndase bien) y estar rodeado de chuflas.

    ... si vais a enseñar los pechos yo me apunto xD

    ResponderEliminar